Una tirita más, porque las anteriores ya están medio cicatrizadas. Una tirita más a la nueva herida detrás de toda esa sangre que ya derramé. Otra, sólo para creer que algún día se cerrará y me dejará creer que es mejor así. Otro bajón, al ver que la realidad es dura, tal vez demasiado. Otra herida en este corazón que vive a base de decepción, que está cansado de sentir y de latir. De que no le enseñen a querer, nada más que a sufrir. Una lágrimas más por su recuerdo, larga vida a su puto recuerdo. Otro llanto más tirada en ese rincón que conoce toda mi historia, que ha presenciado todas mis lágrimas, que me ha dado cobijo y me ha abrazado junto a la soledad en mis peores. Otra caída, otras tantas ganas de no levantarse. Otro levantamiento, y un paso mal dado. Vuelta al principio, a quererte, a sentirte, a pensarte, a odiarte, y a no poder olvidarte. Otro sueño más despierta , donde estoy a tu lado, donde vienes y pides perdón, donde me añoras y yo te echo de menos. Donde de pronto llegas y me abrazas, dices que me amas, que no volverás a separarte más. Otra punzada, otra apuñalada en el corazón, otro dolor inmenso cubriendo y rompiendo la coraza, pegada multitud de veces, tan defectuosa ya.. Otro sentimiento muerto en mi corazón, otro pedido de un corazón nuevo, otra necesidad de no haberte conocido. Otra vez el miedo al ver que no se puede salvar lo que se quiebra, y menos si el destino ya lo escribió, deseando no saber la verdad y diciendo entre sollozos adiós. Combatiendo el dolor, intentando ser fuerte cuando más débil se siente esta pobre caja destrozada por los daños, esta que late aquí dentro. Este dolor simplemente le pone otra marca a este estúpido corazón.