martes, 21 de octubre de 2014

Sabina.

Y regresé a la maldición del cajón sin su ropa,
a la perdición de los bares de copas.

Tanto le quería
que tardé en aprender a olvidarle
diecinueve días  y quinientas noches.

lunes, 20 de octubre de 2014

Sonreír.

Es justo como cuando te dejas en un suspiro la piel.
Lo evitas pero sabes que está al caer.

Estoy de acuerdo en que nos hace falta reír más
y pensar menos,
que demos más abrazos
y no pronunciemos en exceso los pero's.

Yo no sé vosotros,
pero yo hoy necesito sonreír más que ayer
porque siento menos que mañana.
Y mañana...
mañana a saber qué es lo que nos desgarra
el alma.

Pero eso sí, que se sonría
más por amor
que por cortesía.
Por favor.